El museo de La Granja está en las afueras del pueblo de Esporles. Se trata de una excelente excursión en pareja o en familia, y que se puede combinar con una visita al cercano pueblo de Valldemossa, o incluso con una ruta de senderismo en los alrededores.
La Granja es una antigua mansión señorial, cuya historia empieza en la época árabe. Actualmente la propiedad es el resultado de varias épocas y avatares, en una mezcla de estilo señorial y rústico. Además de utilizarse como residencia era también una "possessió" dedicada a la producción agrícola, llegando a tener más de cien menestrales. Ello le confiere el inexplicable encanto de una construcción antigua bien conservada – y que mantiene por tanto el dignísimo estilo propio – pero que a la vez cuenta también con los elementos más decisivos de nuestro rico pasado cultural. Hoy en día La Granja está abierta al público y acoge un museo etnográfico y una variada muestra de animales típicos de granja.
Durante la visita al museo de La Granja de Esporles vas a poder realizar un recorrido por diferentes lugares, habitaciones, estancias, zonas de las actividades agrícolas tradicionales, el palacio, los patios y los emblemáticos jardines de la posesión.
La Granja de Esporles. Comentarios de clientes
Comodidad , rapidez y buen servicio , la atención recibida ha sido y el tiempo empleado conmigo ha sido de 10 , por libra yo he quedado muy satisfecho
Muy interesante y muy bonito,el unico inconveniente es que fuimos al restaurante porque quisimos terminar la excursion haciendo una degustacioon de la comida tradicional y el camarero nos hacia comentarios de que estaba solo y tenia mucho trabajo y nos tuvimos que ir a comer a otro restaurante de esporles.
Un éxito. Totalmente recomendable
Es espectacular todo muy bien cuidado nos encanto
Decepcionados, con el estado de la granja, la hemos visitado en otras ocasiones y nada que ver. apenas agua, fuentes sin funcionar, ausencia de cualquier tipo de degustación. Triste, la verdad, pero el precio no lo bajan. Ni siquiera pudieron comprobar el localizador
Es un museo de la vida cotidiana mallorquina de hace más de cien años. Era una granja autosuficiente, fabricaban para uso propio aceite, vino, tintes, tejidos, productos cosméticos, farmacéuticos, papel etc. También tenían salas de tortura.... Impresiona!! Hemos disfrutado mucho visitándola!
Hemos estado en muchas de estas antiguas mansiones o granjas hoy convertidas en restaurantes turísticos, pero esta se lleva la palma, no solo comes platos mallorquines sino que además puedes hacer un recorrido total de una antigua granja señorial. Visitaremos las dependencias de los trabajadores, sus aperos, lavaderos y viviendas para después y a través de unos jardines con cascada incluida pasar a visitar la mansión de los señores con todas sus dependencias, salones, dormitorios, comedores, salas de juego y costura etc. Mas tarde veremos como eran prácticamente autosuficientes pues veremos su almazara, su prensa para vino, los telares donde preparaban y teñían la lana, la zona de curtidores, la bodega, la fresquera y almacenes, una inmensa cocina, sus propios zapateros y para que nada faltase hasta un completo consultorio médico, es decir todo al completo. Tan completo que hasta tiene cárcel con sala de torturas, no porque se emplease sino por un capricho de un antiguo dueño estudioso de la Inquisición. Al acabar la visita en el patio tú mismo te servirás de unos toneles una o dos copitas de vino dulce y antes de salir te obsequiaran con unos buñuelos . También verás cabras, gallinas, asnos y pavos entre otros. A la salida podemos visitar sus jardines de reminiscencias árabes. Una gozada imprescindible en Mallorca.
Es una granja museo, donde recrean la vida en las islas Baleares, es curioso vas visitando habitaciones, lugares especiales, hay un lugar donde te invitan a probar vinos que están en toneles y para los niños naranjada, los jardines son muy bonitos, bueno, seguro que disfrutarán. Reservamos nuestros tickets en click mallorca porque así nos salía más barato, y además no teníamos que imprimirlos, lo cual nos pareció muy buena idea
Visita muy recomendable tanto para adultos como para niños, donde ver el estilo de vida y los trabajos que se hacían dentro de una "possessió" mallorquina hace 200 o 3000 años. Visita separada por habitaciones, estancias, lugares, donde se ve como se hacía el aceite, el vino, se teñía la ropa, se lavaba, la cocina, etc. Con la entrada se tiene acceso a todas las estancias durante todo el día, pudiendo llevar el picnic para comer fuera. Recomendable 100%.
Es una visita muy interesante, el tamaño de la granja es descomunal, está muy conservada, podemos ver como era la vida de esta gente ya que dispone de infinidad de herramientas, elementos decorativos, muebles, etc de la época, el menú degustación, como bien dice, es degustación, ni mucho menos vas a comer, es una pequeña muestra de la gastronomía mallorquina, no obstante merece la pena.
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